GINEBRA, 20 de abril de 1998 (PL).-- Cuba exhortó hoy aquí a un grupo de países, entre ellos Estados Unidos, a ratificar la Convención de los Derechos del Niño, que en la actualidad cuenta con el apoyo de alrededor de 190 naciones.
El llamado pera que esa Convención sea ratificada de manera universal fue hecho por la delegación cubana ante el 54 período de sesiones de la Comisión de Derechos Humanos que se desarrolla en esta sede de la ONU y deberá concluir sus labores esta semana.
En una intervención esta tarde ante ese órgano de Naciones Unidas, Aymée Hernández Quesada, integrante de la representación diplomática de Cuba en Ginebra, resaltó la importancia de ese instrumento internacional para proteger a los niños en situaciones de conflictos armados, de la prostitución, la pornografía y el comercio ilícito de los infantes destinado a la venta de sus órganos.
La funcionaria de esa nación caribeña alertó que en todas partes del mundo, sin excepción de latitudes o niveles de desarrollo, pesan en la actualidad gravísimas amenazas contra los menores.
Añadió que muchos de esos problemas, especialmente la prostitución infantil y la venta de niños, han dejado de ser privativos de los países más pobres para enseñorearse también en las poblaciones menos favorecidas de las naciones del denominado Norte rico.
Hernández Quesada expresó que tomando en cuenta esas terribles amenazas que enfrentan los niños, su país observa con notable insatisfacción que algunas naciones aún no hayan cumplido el compromiso con la citada Convención, entre los cuales figura Estados Unidos.
Precisamente en un informe presentado la pasada semana ante la Comisión de Derechos Humanos, el Relator Especial encargado de verificar la situación de las penas de muerte en territorio norteamericano, llamó en el mismo documento a las autoridades de Washington a ratificar definitivamente la convención universal para proteger a los menores, se recordó.
Por su parte, la representante cubana se refirió en su alocución de hoy al hecho de que en Estados Unidos la situación de los niños era la peor de todas del mundo industrializado en el primer quinquenio de esta década.
Citando estadísticas del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), Hernández Quesada comentó que en el país más poderoso del mundo el 20% de los menores viven por debajo del umbral de la pobreza.
Ese porcentaje --añadió-- varía entre el 5 y el 10% en Europa Occidental, y en otros estados del norte desarrollado.
Otros datos revelados en el 54 período de sesiones de la Comisión de los Derechos Humanos subrayan que en Estados Unidos el 18% de los niños blancos nacen pobres, mientras el 46% de infantes negros llegan al mundo en similares condiciones de vida.
En otra parte de su intervención, la diplomática cubana destacó con satisfacción los logros alcanzados por la isla caribeña en lo que respecta a la atención de los niños durante las últimas cuatro décadas, pese al bloqueo económico y comercial de que es víctima por parte de sucesivas administraciones norteamericanas, acotó.
Recordó que en la actualidad la tasa de mortalidad infantil en la Mayor de las Antillas es de 7,2 por cada mil nacidos vivos, considerada entre las más bajas del mundo, mientras todos los niños tienen acceso gratuito a los servicios de salud, como el resto de la población, y a la educación, precisó.
En igual sentido, Hernández Quesada resaltó la labor encomiable de los médicos cubanos, al hacer referencia a que los menores en su país están limitados de recibir medicamentos que hayan sido patentados en los últimos 15 años en laboratorios norteamericanos.
Esa situación derivada del injusto bloqueo estadounidense a la isla, que además prohíbe importar instrumental médico procedente de Estados Unidos, constituye una violación masiva y flagrante de los derechos humanos, concluyó la representante cubana.