Concepción Hernández López(7)
-- 100.000 personas mueren de hambre diariamente
-- 2 millones de niños fallecen al año por falta de vacunas
-- Hasta 14 millones de menores de 5 años mueren de hambre
-- Uno de cada cinco habitantes del mundo viven en la extrema pobreza
Mientras estas situaciones se suceden en todo el mundo se hace pública la fabricación europea de aviones de combate en la que España participa con 870.000 millones de pesetas, cuando con un solo eurocaza de los 600 que Europa adquirirá se podrían construir 1.000 viviendas.
A pesar de las cifras aportadas y de que 1996 es el Año Internacional para la Erradicación de la Pobreza, la ayuda que los países pobres ha disminuido a niveles de hace 20 años. Sólo cuatro países --Noruega, Dinamarca, Suecia y Países Bajos-- mantienen valores superiores al 0,7%.
España, junto con Nueva Zelanda, Italia y Estados Unidos se sitúan por debajo del 0,27%. Del 0,28% en 1994 pasó al 0,24% en 1995, lo que ha supuesto un incumplimiento de los acuerdos adoptados por el Gobierno que preveían alcanzar el 0,35%.
Dinamarca es el país que más proporción de su P.N.B. dedica a los países empobrecidos con un 0,97% y el que menos Estados Unidos con un 0,1%, que además ya ha anunciado que para 1997 destinará aún menos recursos a este capítulo.
Esta creciente insolidaridad, es una nueva ola de política económica que intenta reducir el déficit público recortando gastos sociales y desmontando el Estado de Bienestar.
A pesar de que el Partido Popular se comprometió en su programa electoral a alcanzar el 0,35% del P.N.B. y a promover medidas fiscales y legales para conseguir aportaciones privadas que garanticen el 0,5% cuando ha llegado al gobierno no solo ha incumplido sus promesas sino que la política sobre cooperación que está realizando es insolidaria y guiada por criterios totalmente mercantilistas.
Concretamente en el Ayuntamiento de Murcia, contra todo lo que afirmaron antes de las elecciones no sólo han recortado drásticamente la partida dedicada a la ayuda al desarrollo a través de las ONGs murcianas, sino que han despreciado e ignorado la opinión de las ONGs, los demás grupos municipales y el propio Consejo Municipal de la Cooperación. Como culminación de esta trayectoria que tuvo su hito en la unilateral suspensión de subvenciones por valor de 60 millones en 1995 a proyectos aprobado por el Consejo Municipal de Cooperación, este año sólo han financiados a finales de octubre 50 millones de los 180 millones que están recogidos en los presupuestos de 1996 para este fin. Además, el gobierno del PP ha aprobado unas nuevas normas para la convocatoria de proyectos de cooperación que introducen, contra la expresa opinión de IU, las ONGs murcianas y del Consejo Municipal, el disparate de reducir las ayudas máximas al 50% y abrir la convocatoria a las actuaciones con inmigrantes, hasta ahora correspondientes a otro programa de actuación municipal.
Paradójicamente este recorte se produce en un momento de eclosión popular de la sensibilidad, ante la situación del Tercer Mundo, y cuando mayor vitalidad y respaldo social encuentran las Organizaciones No Gubernamentales para el desarrollo de las cuales tienen presencia en Murcia más de 40. Según el informe anual de Intermón, un 65,6% de la población está a favor de dedicar el 0,7% del P.N.B.
La trayectoria seguida hasta ahora por el PP desde su acceso al gobierno tanto Nacional, Regional, como Municipal, se está convirtiendo en una clara amenaza para el futuro de la Cooperación al Desarrollo con los países del Tercer Mundo. Los ciudadanos y ciudadanas pueden comprobar la auténtica faz del PP en cuanto a la Solidaridad y desarrollo con los países empobrecidos, de lo que es una muestra su actuación en el ayuntamiento de Murcia.
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